Hoy es otro (By Luis Chávez)
Quebré un vidrio y entré en la casa. Sobre la mesa, restos de pan y un poco de té. Terminé lo que quedaba del desayuno y cuando bajaron los niños fui a dejarlos al colegio. De vuelta ingresé al almacén, pesé unas verduras y se las entregué a la señora que esperaba impaciente. La cajera aceptó tomar un café y nos sentamos al lado del ventanal mirando hacia el parque. El amanecer se anunciaba. Me duché con tranquilidad y dejé el desayuno a medias. Mientras salía hacia la fábrica escuché un vidrio quebrarse.
(Mención honrosa en el concurso de cuentos "Santiago en 100 palabras")
(Mención honrosa en el concurso de cuentos "Santiago en 100 palabras")
1 comentario
Paula -
Él, su mujer, sus niños (dos, tres...cuatro...) la cena de la noche antes (a saber que contarían las migas) La señora que compra, la cajera con la que toma el café, la gente que pueda estar en el parque a esas horas tan tempranas.... todo el día por suceder.... Y la historia del vidrio quebrado. (Casi he gastado yo más intentando decirlo)